6/11/07

Fin del mundo

Un buen día, desapareció.

Sin despedida. Sin excusas, lamentos ni reproches, sin por qués, sin hacer ruido. Ya no estaba.

Pasó tiempo hasta que me di cuenta de que las cosas no pasan porque tienen que suceder y empecé su busqueda. Llegué hasta el fin del mundo para dar con ella.
Estaba ahí, tan lejos y siendo la misma.

No sé que hizo estallar la burbuja de ganas por decirle que también llegué hasta allí pero el caso es que me quedé de espectador, alejado sin decir nada. Era tan bonito lo que veía en su nuevo hogar que no quise romper el encanto.

Seguro que algún día regresa de manera fugaz, y hasta puede que disfrazada con nombre falso me diga un nada comprometedor "hola". Sabré que es ella.

Intentaré ser sutil y discreto para decirle lo que me alegra haberla encontrado, saber donde está y lo bien que está. Estaré feliz de saber que ella sigue allí, en el fin del mundo.

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